Regresamos, luego de la pausa

Retomar las metas, proyectos, sufrir la evaluaciones, jaranear con amigos, encontrase una pareja o solo romancear platónicamente, eso es volver a la escuela.

Con la misma expectativa que dejaron las aulas hace apenas unos pocos días, regresan los educandos este 5 de septiembre a sus centros educativos para reiniciar el Curso Escolar Cuba 2021-2022.

La Enseñanza Artística en Holguín reinició la presente etapa lectiva con mucha alegría, al decir de su subdirectora provincial, Bárbara Yarruhs, contando con un claustro y consejo de dirección completos en cuanto a plantilla laboral se refiere.

Más de 650 estudiantes regresan al encuentro con el conocimiento convocado para la ocasión de forma atípica por motivos de la pandemia de Covid-19, que obligó a modificar el presente periodo lectivo con una pausa durante el mes de agosto, luego de iniciar en marzo pasado, y para culminar el próximo 19 de noviembre.

“Las condiciones indispensables para hacer un buen fin de curso están garantizadas, al igual que toda la alimentación, base material de vida, estudios y especializada”, asegura la Subdirectora de Enseñanza Artística perteneciente a la Dirección Provincial de Cultura en Holguín.

“Hace alrededor de 10 días entraron unos accesorios necesarios para los instrumentos, se afinaron además todos los pianos de la enseñanza, así como los instrumentos de vientos, por lo que este debe ser un reinicio muy fructífero y un final de curso exitoso”, acota Yarruhs.

La presente etapa lectiva y su estrecho periodo de tiempo-en comparación con sus homólogos de años precedentes-, obligó a tomar medidas en cuanto al sistema evaluativo, por tal motivo se han regulado los trabajos de control parcial y en muchas de las asignaturas que habían dos, se redujo a uno, aunque “se mantiene un seguimiento con actividades de control sistemáticas para llegar al examen final que se realizará a finales de octubre e inicios de noviembre”.

El próximo curso, 2022-23 iniciaría el 28 de noviembre y se extenderá hasta el mes de julio de 2023, para posteriormente, ya en septiembre del propio año, comenzar con un calendario normal, como los precedentes a la Covid-19, o sea, el curso 2023-2024.

Por su parte, en nuestra provincia, los estudiantes que se gradúan de 4to año, asisten durante esta etapa a la escuela para actividades específicas, como la “práctica de conjunto”, pero ya concluyeron su periodo de estudios y, muchos de ellos-al decir de Yarruhs-, en la especialidad de danza y música por ejemplo, se han incorporado a las instituciones culturales donde van a ser ubicados: “como parte de un convenio entre la escuela y la compañía o institución están asistiendo, durante el tiempo que debían estar en las aulas, a esas instituciones donde se nutren de nuevos conocimientos de la especificidad donde van a trabajar, pero con el seguimiento de la escuela, por ejemplo así está la Banda Provincial de Conciertos, la Orquesta Sinfónica o la Compañía de Danza Contemporánea Codanza”.

La Escuela Elemental de Arte Raúl Gómez García, la Escuela Profesional de Música José María Ochoa, la Academia Profesional de Artes Plásticas El Alba y la Universidad de las Artes (ISA), devienen en los centros que integran la enseñanza artística en el nororiente cubano, donde se preparan los futuros talentos de varias provincias del oriente cubano.

Interacción: simbiosis de arte

Cuando los esfuerzos se unen para concebir proyectos que vinculan dos o más manifestaciones artísticas el resultado comúnmente no puede ser otro que no sea positivo.

“Interacción” es la propuesta del reconocido productor musical holguinero Dj Arte, o Artemio Vigueras, el cual encuentra cita cada cierto tiempo en el Centro Provincial de Artes Plásticas de Holguín.

La céntrica esquina de la Ciudad de los parques devino en la tarde noche de este sábado 3 de septiembre, en espacio propicio para el disfrute de buena música de tendencia actual, en simbiosis con las artes visuales.

Lidisbelis Carmenate Díaz, graduada de Artes Plásticas de la Academia El Alba y coorganizadora del proyecto, destaca que en él convergen algunos “colegas”, quienes en su mayoría trabajan el soporte digital con video arte.

Cuatro presentaciones suma la naciente propuesta, devenida en una invitación a los artistas para unirse al espacio: “La primera vez se hizo en la sala pequeña del propio Centro de Arte, donde participaron de forma casual, informal, los creadores, a través de un diálogo ameno y fructífero”, asegura Carmenate.

Mostrar más allá de la galería, del espacio cerrado, el trabajo del artista, para atraer al público, a través de esa simbiosis de varias manifestaciones, con esencialmente el video, fue el objetivo de la presentación de este sábado, ofrecida a los transeúntes y a quienes disfrutan de un rato en el Parque Calixto García.

Hace varios meses se gestiona la propuesta, con varias presentaciones precedentes y que por estos días coincidió con el cierre de la etapa estival. Guillermo Marsuvo, artista argentino, Frank Lahera, de Santiago de Cuba, y Juan Carlos Domínguez, son algunos de los creadores que han transitado por el espacio, de conjunto con la buena música de su anfitrión, Dj Arte.

Como una opción diferente y atractiva surge “Interacción”, que a pesar de no contar aún con una fecha fija, casi siempre se realiza cada uno o dos meses en el propio Centro de Arte; desde ahora el llamado a las autoridades competentes para que los holguineros puedan disfrutar de la simbiosis del buen arte justo mientras comparten con su familia y amigos en ese espacio indispensable para los nacidos en el nororiente, el Parque Calixto García y sus alrededores.

Las manos prodigiosas de Blanca Rosa

Por Lissett del Carmen Creagh Frometa (Licenciada en Historia del Arte y promotora en el Centro Provincial de Artes Plásticas).

Cuando se habla de arte popular en Cuba sin duda alguna Blanca Rosa Chacón está presente. Madera que pasaba por sus manos dejaba de ser un simple pedazo de palo para cobrar vida con la incansable creatividad de la escultora. Desde el pasado 20 de julio y durante todo el mes de agosto el Centro Provincial de Artes Plásticas de Holguín exhibe, en su Sala Transitoria, la muestra antológica Por siempre Rosa.

Con instrumentos tan disímiles como inimaginados para lograr tal perfección, Blanca Rosa conseguía reflejar hasta el más mínimo detalle en sus figuras, sorprendiendo a todo el que se acerca.

 

Desde las más genuinas tradiciones del país, nuestros antepasados (aborígenes y esclavos), el trabajo campesino —ya poco común en nuestros campos—, ese vecino que todos conocemos y personajes habituales de nuestra realidad, incluso conocidos mundialmente, podemos encontrarlos salidos de las manos incansables de la talladora. Escenas populares que cuentan una historia. Está presente el tradicional retrato familiar de la pareja recién casada con la voz de la experiencia a su alrededor, la abuela que, desde detrás del pilón, siempre tiene listo el café para todo el que llegue de visita, la que se abre camino en las noches con el candil encendido en una mano y un bastón guía en la otra, el conjunto musical que ameniza el guateque campesino junto a la pareja de baile que defiende el zapateo al compás de la música y hasta el gran Hidalgo y su fiel escudero en busca de molinos por los campos cubanos, todas las figuras con un nivel de perfección tal que no creeríamos que son esculturas de una artista sin escuela, su academia fue la persistencia y el amor puesto en cada trabajo.

Es su casa, en el poblado de Uñas, municipio holguinero de Velasco, una gran exposición de sus tallas, tan queridas como si de hijos se tratara, donde posó sus manos también en la decoración, apreciándose la unión de lo utilitario con el toque exclusivo de su autoría (desde el umbral de la entrada hasta camas, lámparas y tapas de enchufes). De estas se lograron trasladar hasta el Centro de Arte solamente 33 esculturas de madera doblemente preciosa (pues la escultora trabajaba sobre todo la caoba, el cedro, el roble y la majagua azul) que transpiran sencillez, la misma que representa al campesino y que es fruto de las manos creadoras de Blanca Rosa (Tomado de http://cnap.cult.cu/noticias-arte-cubano/las-manos-prodigiosas-de-blanca-rosa/).

 

Iluminaciones de Víctor Manuel Velázquez

 Por Erian Peña Pupo

Iluminaciones, exposición que reúne dieciséis piezas del artista visual Víctor Manuel Velázquez Mirabal (Holguín, 1980) realizadas en su mayoría durante la Covid-19, se exhibe en el Hotel Ordoño, como parte del XVI Festival Internacional de Cine de Gibara. 

La obra de Víctor Manuel recuerda esa confluencia borgeana de la que he comentado en otros textos: coincidencia de escenarios, tiempos, contextos, personajes, lugares, objetos… en las posibilidades confluyentes de un mismo espacio (su pintura). Su imaginación fructífera, neobarroca, desbordante, desemboca –como si una de sus islas ebrias, como el barco de Rimbaud, encontrara playa segura para su viaje errante– en el lienzo y en los múltiples soportes que, en búsquedas más recientes, han definido también su trabajo, pues Víctor Manuel sabe, como el gran argentino, que “todo lenguaje es un alfabeto de símbolos cuyo ejercicio presupone un pasado que los interlocutores comparten”, y que estos símbolos van armando una cosmovisión tan peculiar como imprescindible para recorrer su obra. Adentrarse en Iluminaciones, con la seguridad del constante descubrimiento en cada pieza –estableciendo diálogos, muchas veces más sutiles, otros más complejos, pero siempre enigmáticos, interrogativos, sui generis, para nada gratuitos, entre autor/obra/receptor–, es adentrarse en un entramado de símbolos que conviven en estas piezas, que se entrecruzan y cobran autonomía, como parte de ese cuerpo mayor, el cosmos de su poética. 

El precio –escribió el propio Víctor Manuel en las palabras del catálogo– es renunciar a la cordura. “La certeza de que no siempre vas a lograrlo –dice– hace de ti un obrero distinto, un ser incompleto, un huérfano, sabedor de que una parte monumental de tu hechura caerá a la espiral del olvido. No pintarás para siempre. La musa vendrá un rato junto a ti, y luego eso será todo, tu breve racha ganadora habrá terminado”. Víctor Manuel experimenta con la acuarela, una difícil técnica que defiende aunque explore otras; y aunque insiste en decir que cada día aprende más y se le abren nuevas posibilidades con ella. Cada mancha, cada fluctuación del agua y del color sobre el soporte, cada línea huidiza, dan cuerpo a disímiles criaturas, seres que emergen de los laberintos de su imaginación y se corporizan. Dentro del caos, florece el árbol, reverbera la luz, escapa el ave, nace la isla… y un universo ilusorio y mágico (y no por ello menos real); un sitio de entrecruzamientos culturales de múltiples honduras, resultado de complejas búsquedas (literarias, artísticas, espirituales) primero como ser humano, y por consiguiente, como artista plástico. “Envanecido, en mi ambición quise crear absurdos como la nostalgia, el coraje, el deseo, chisporroteo de locas ideas bullendo por salir al unísono, desordenado canon carcajeándose en capital estampida… De eso parecen tratar estas piezas: un ermitaño dios antediluviano que vocifera un cuento susurrado, cual nana para el valiente que se hace a la osadía de pintar”.

En sus cuadros hay también cierta narratividad… Muchos “cuentan” historias, contienen “relatos”… Una mancha: un rostro. Un trazo: la amplitud de posibilidades. Aves, peces, ramas, frutas, caballos, perros, gatos… pueblan su obra. A la constante zoomórfica, se suman personajes como salidos de los más fantasiosos libros de caballería o de bestiarios medievales (o las maravillas que encontró Yambulo en su viaje por las Islas del Sol). Un carnaval de figuras acoplándose, ganando espacio, surgiendo de la nada… Barcas como islas, islas como carretas, cáscaras de nuez a la deriva, torres y ciudades emergiendo del aire… Objetos de múltiples naturalezas, simbiosis de mundos posibles que parten, varias veces, de referentes literarios, incluso que desde el título anclan la obra: desde Cien años de soledad, de García Márquez; La consagración de la primavera, de Alejo Carpentier, inspirada en el ballet de Ígor Stravinski; Extracción de la piedra de la locura, conocida obra de El Bosco, pero también motivo de un poemario de Alejandra Pizarnik, hasta El maestro y Margarita, de Mijaíl Bulgakov. En otras obras, símbolos de cubanía, retazos de identidad, memoria y nostalgia que han alimentado su paso por los años, conviven con los referentes clásicos. 

 

Aperturan jóvenes realizadores cubanos concurso de animación en Gibara

Con la presentación de los cortometrajes cubanos Pez Luna y Jake up mate en la sala B del cine Jibá inició la visualización de las obras del concurso de animación, del XVI Festival Internacional de Cine de Gibara.

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Gibara: un viaje de Cine

Sumidos en el estrés económico, político, epidemiológico, climatológico, y de tantas otras aristas de la sociedad globalizada en el que nos encontramos hoy, los supervivientes a la pandemia de Covid-19 no hemos concientizado cuanto pudo afectarnos esos dos años de incertidumbre y temor colectivos.

A un incierto final nos llevaron en muchas ocasiones las posturas fatalistas y el pesimismo que en más de una ocasión pudo apoderarse de la fe más sólida y arraigada. Analizar estos derroteros existenciales desde la óptica de nuestros adolescentes y jóvenes de temprana edad deviene en una atractiva propuesta, sobre todo si intenta desde el panorama audiovisual.

La 16 Edición del Festival Internacional de Cine de Gibara arrancó en la mañana de este martes 2 de agosto con diversas propuestas culturales donde el apartado audiovisual competitivo deviene en eje central de las propuestas. El Concurso documental de la presente cita encuentra en el Museo Municipal de la Villa Blanca escenario sui géneris para la proyección de las obras en sana disputa: La fiesta del fin del mundo (España.14’), Orgullo rural (España. 15’), Las hostilidades (México. 70’) y De Quijotes y semillas (España. 88´), fueron las sugerentes propuestas de la jornada inaugural.

Cuestiones existenciales de una etapa difícil en nuestras vidas, la adolescencia y las relaciones de pareja, son analizadas a fondo en La fiesta del fin del mundo, que, como su título apocalíptico evoca, se desarrolla además durante los momentos más difíciles de la presente pandemia. El papel de las Redes Sociales (sobre todo el Whatsapp), la creciente digitalización de las emociones y sentimientos, así como una filosofía de vida basada en la añoranza por el pasado, ante un presente y futuro incierto, devienen en temas medulares para el cortometraje hispano que nos propone un tema tan actual como preocupante en lo que respecta a los efectos psicológicos de la reciente pandemia.

Por su parte, Orgullo rural, es un estandarte de valentía y como vocero además ante la lucha de la Comunidad LGTBQ+. Un síndrome de down o un agricultor gay son figuras bastante sui géneris para nuestro contexto y, si bien es cierto que se trabaja por superar estos esquematismos y estereotipos de género tradicionales impregnados en las familias, sobre todo de estas zonas, impulsos comunicativos como este sirven para desmontar toda esta suerte de prejuicios y abrir las mentes hacia los derechos y preferencias sexuales, así como transmitir a las próximas generaciones y trabajar con las presentes en busca de posturas más flexibles en lo que refiere a este sensible tema.

Al interior de una comunidad marginal en México nos traslada Las hostilidades, documentando el modo de vida de varios sectores poblacionales expuestos a los prejuicios sociales de las clases más altas. Un Hot spot o punto rojo, como se le denomina en el país norteño, es diseccionado a través de lente de su realizador quien intenta desmontar estereotipos, sin dejar de exponer la cruda realidad de estas, donde pobreza, violencia, armas, drogas, alcohol y tantos otros problemas sociales se entrecruzan para desembocar en una suerte de destino fatal e ineludible para quienes allí habitan.

900 kilómetros a bordo de una ‘verducleta’ (carretilla-bicicleta para vender verduras), desde su Tudela natal hasta Málaga, recorren los protagonistas del documental “De quijotes y semillas” (España. 88´), para acudir al encuentro de hortelanos, “los últimos quijotes del país”.

Estos aventureros del siglo XXI emprendieron su “viaje de cine” por varios pueblos ubicados en medio del trayecto, intercambiando saberes populares, tradiciones y sobre todo una conciencia ecologista. Las semillas del conocimiento son plantadas durante este periplo que busca avivar esa “España vacía”, pueblos prácticamente abandonados, donde se encuentran esta suerte de tesoros ocultos al conocimiento global. Soberanía alimentaria y agricultura ecológica constituyen conceptos indisolubles al audiovisual donde incluso puede apreciarse una biblioteca de semillas dentro de la propia Biblioteca Municipal; todo ello en pos de la salvaguarda de la cultura popular, tarea emprendida por esta suerte de quijotes bajo el precepto de que “Si te rondes hoy, de nada sirvió el esfuerzo que hiciste ayer”.

Salvador Pavón, cronista naif de la ciudad de Holguín

Por Erian Peña Pupo

Fotos del autor

Al recorrer la exposición personal 300 años y más, del artista Rolando Salvador Pavón Gómez en la galería El Zaguán, del Fondo Cubano de Bienes Culturales de Holguín, notamos que Pavón es un creador nada ingenuo, aunque asuma el naif –caracterizado por la espontaneidad, el autodidactismo de sus exponentes, los colores brillantes y contrastados y la perspectiva acientífica captada por intuición, que en muchos aspectos recuerda (o se inspira) en el arte infantil, incluso ajeno al aprendizaje académico– como la corriente artística con que se vale para expresar sus inquietudes diarias.

En Holguín donde el naif no es tendencia –aunque con la notable excepción de Julio Breff en Mayarí–, como sí lo es, por ejemplo, en ciertas zonas de Santiago de Cuba, Pavón, quien está al frente de la asociación de artistas plásticos de la UNEAC en la provincia, ha sabido armar una cosmogonía distinguible a simple vista en el contexto plástico local. Ha defendido su estética: sus cuadros no se parecen a otros, sus ciudades –siempre Holguín como inquietud primera– le pertenecen en todos sus matices.

Esta pertenencia habita en toda su extensión en 300 y más, una selección de piezas donde, como apuntábamos, la ciudad de Holguín es el eje del relato pictórico, y que viene a ser compendio de su amplio bregar para intentar captar –cosa que sin dudas Rolando Salvador ha logrado en estas obras– la idiosincrasia del holguinero en su ciudad, aquello que, aunque llevado a la figuración del naif, por momentos exagerada, por momentos ingenua, lo caracteriza sin dudas en la plástica local, y por tanto, en la nacional.

300 y más es una invitación para descubrir la ciudad desde varios ángulos: lo social, lo político, lo religioso, lo cultural… como parte de su raigambre identitaria. “Alejados de calificativos técnicos que impiden apreciar esencias, compartimos con el cronista del pincel, su regalo. La labor del orfebre del tejido intrincado de figuras icónicas, escenas y tradiciones culturales arraigadas en el pueblo. Entonces sentimos el musical fluido de las aguas dulces por las calles en la estación de las lluvias, el pitazo estremecedor del tren habanero que concita el bullicio de la gente que se dispersa a los campos cercanos o asistimos a una boda en familia o al cumpleaños del fuego que calienta más que el sol del trópico”, escribió el antropólogo José Millet en las palabras de catálogo de la muestra.

La Loma de la Cruz, epicentro de buena parte de los cuadros, los carnavales que peculiarizan los festejos estivales, el béisbol como pasión e identidad, eventos culturales como las Romerías de Mayo, el transporte público… son algunos de los elementos para asimilar y recorrer la muestra personal de Salvador Pavón, con curaduría y museografía de Danilo López, quien realizó la dirección general. Elementos identitarios de la urbe –el parque Calixto García, el estadio con igual nombre, el Gabinete Caligari, el propio Centro Provincial de Arte, el parque El Quijote, la Catedral San Isidoro, entre muchos otros– y sus habitantes, peculiarizan una poética para nada ingenua, sino al contrario: llena de guiños e acercamientos sociales y culturales: “Héroes anónimos”, “Sueños de cachorros”, “Homenaje al Rey”, “La boda”, “Cervantes en Holguín”, “Cumpleaños de abuela” y “Llegó la energía”, se encuentran entre las obras.

El artista, “con su fiesta de vivos colores y los dibujos de finos puntillismos” con los que celebra los 300 años y más de Holguín, “ha captado mejor que los historiadores el color local de la Ciudad de los Parques y nos permite viajar a su lado a una Romería de Mayo donde percibimos mejor las tonadas humorísticas del juglar El Guayabero, añade Millet.

La mirada de Salvador Pavón, cargada de los rasgos típicos del naif, pero no dependiente de ellos, viene a adentrarse en los entresijos de la ciudad de Holguín, siguiendo la mejor tradición insular que se ha apropiado de las urbes. Así revisita sus elementos identitarios, los hace suyos y nos lo muestra con la sugerente línea de su pincel (web Uneac).

Los Buenos Aires que trajeron a “Estrellita Caracol”

Por cosas del azahar, el universo, o cualquiera que prefiera asociar usted en dependencia de su fe, despertaron de un sueño y convirtieron en realidad ese anhelo de años la cantautora holguinera Edelis Loyola y la ilustradora argentina “Estrellita Caracol”.

Foto: Claudia Patricia Domínguez.

Toda un gira por Cuba emprendió la creadora natal de Buenos Aires quien fue invitada por la cantante Rochy Ameneiros con motivo del Festival “Corazón feliz”, organizado en La Habana entre el 26 al 30 de mayo pasado, : “fue hermosísimo participar en él porque conocí a un montón de artistas que admiro mucho como Rita del Prado, Enid Rosales, Rosa Campos…pero cuando surgió la invitación decidí quedarme un poco más para poder conocer a Edelis, soy muy afortunada hacerlo de esta manera”.

Un periplo donde consta la visita a Matanzas y varias de sus instituciones culturales, pasando por nuestra ciudad, luego a Cienfuegos, para posteriormente partir hacia su país suramericano, emprendió “Estrellita…”, quien no podía dejar de venir al nororiente cubano para disfrutar la obra de Edelis: “dentro de los proyectos que teníamos era poder trabajar juntas, ella haciendo sus collages y yo cantando mis canciones, ha sido un sueño hermoso hecho realidad; además preparamos un programa de actividades muy lindo, fuimos a la Uneac provincial, la Editorial Cuadernos Papiro, a la Loma de la cruz, a la Casa del cuento, a la Academia de Artes Plásticas El Alba, a Ediciones La Luz, e incluso hasta Gibara llegamos; donde quiera bien recibidos con la hospitalidad que nos caracteriza a los holguineros, y ella además se ha sentido muy bien, sobre todo por concretar este sueño que hermana a los pueblos a través del arte”.

A través de unos amigos argentinos que hacen música para niños, la agrupación Los Canticuénticos-ellas es la ilustradora de toda su obra-, Edelis Loyola conoció a “Estrellita”: «cuando vi su trabajo me quedé sorprendida porque es una gran artista con una peculiaridad además, que trabaja el collage con papel desechable. Hicimos una gran amistad y quedamos en vernos hasta ahora que lo concretamos gracias a su viaje a Cuba… A partir de ahora comenzaremos a trabajar desde ambos países con colaboraciones y si se puede viajar a Argentina para hacer esto mismo”, agrega la prominente compositora infantil holguinera.

Foto: Claudia Patricia Domínguez.

Por su parte, e impactada de igual forma, “Estrellita Caracol” señala que “el maravilloso trabajo de Edelis con la infancia lo conocía y soñaba con colaborar con ella en vivo. Hace una semana que estoy acá, con experiencias increíbles, ahora salgo para Cienfuegos en una maratón, estoy cansada pero muy feliz, me he llenado de amor y tantas emociones que espero regresar, me encantaría. El arte salva y es para todos, es un derecho y una manera popular de expresarnos”.

Inician jornadas del Taguabo 2022 en la UNEAC de Holguín

Por Erian Peña Pupo

Con el objetivo de reflejar la actividad comunitaria y el desarrollo artístico de los medios audiovisuales, y promover la cultura de apreciación y cuidado del medio ambiente y la defensa de los derechos de las niñas y los niños, inició el XII concurso de audiovisuales Taguabo 2022, organizado por la sección de Cine, Radio y Televisión (CRTV) de la UNEAC en Holguín. Continuar leyendo «Inician jornadas del Taguabo 2022 en la UNEAC de Holguín»

Fiesta de la lectura para todos

Por Vanessa Pernía Arias

Fotos Wilker López y Eliecer Peña

Con una gala artística frente a la Biblioteca Provincial Alex Urquiola quedó inaugurada en Holguín la 30 edición de la Feria Internacional del Libro, que se extiende hasta el próximo día 29 con una amplia programación literaria y cultural en diferentes escenarios de la ciudad.

El espacio –dirigido por Carlos López y con interpretaciones, entre otros, del Mariachi Holguín e intérpretes del Teatro lírico Rodrigo Prats, y conducción del poeta Moisés Mayán– homenajeó la obra de los escritores holguineros Manuel García Verdecia y Eugenio Marrón Casanova, importantes intelectuales que cultivan la poesía, la narrativa, el periodismo, el ensayo y la crítica, y compañeros de la misma generación, promovida con el auge cultural de los años 80; a quienes se les dedica en esta ocasión la cita literaria en la provincia.

Del mismo modo se recordó la impronta de Ediciones La Luz, sello de la Asociación Hermanos Saíz en Holguín, en sus 25 años, defendiendo y promoviendo la literatura hecha por noveles escritores; así como el 60 aniversario del semanario ¡ahora!, y al libro universitario holguinero, representado por Ediciones Conciencia, a quienes también se rinde homenaje. El poeta Luis Yuseff, editor jefe de La Luz, tuvo a su cargo las palabras de apertura.

Seguido a esto quedó abierta la Gran librería, ubicada en el Complejo Cultural Plaza de La Marqueta, donde el público puede encontrar los diferentes títulos, cerca de 392 novedades editoriales, disponibles en la Feria, entre ellos los de los sellos editoriales de la provincia. El espacio fue recorrido por las principales autoridades político y gubernamentales de la provincia: Ernesto Santiesteban Velázquez, miembro del Comité Central y Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Holguín; Julio César Estupiñán Rodríguez, Gobernador de Holguín; Osmani Viñals, Primer Secretario del PCC en el municipio Holguín, y Rachel García Heredia, directora de Cultura, entre otros dirigentes de esta provincia. Además, el Ministro de Cultura Alpidio Alonso, y Abel Prieto, director de Casa de las Américas, de visita en la Feria holguinera, recorrieron los diferentes stand de la Gran Librería.

Como parte de esta jornada inicial se inauguró el espacio La Hora Tercia, con la presentación de las novedades editoriales de Ediciones La Luz; se dedicó un panel al Premio Alejo Carpentier y su impronta en la narrativa cubana; en la calle Mercado 1 abrió sus puertas el Pabellón Infantil con variadas propuestas escénicas y literarias para los más pequeños de casa; y el Pabellón de Ciencias Sociales José Agustín Castañeda inició sus propuestas.

Al igual que en otras provincias cubanas, la Feria se dedica de manera general a los escritores Luis Álvarez y Alberto Prieto, y a México como país invitado de honor, evento que contará con la presencia en la provincia de nueve países expositores, entre ellos Panamá, Colombia y Perú, que presentarán diversos títulos. La Feria del Libro de Holguín se convierte cada año en una de las más abarcadoras e importantes realizadas en el territorio nacional, por sus invitados y por la amplia programación cultural desarrollada, además por organizar el Premio a la Mejor Edición que se otorgará como colofón de esta importante cita.