“Yo soy del punto cubano…”

Fotos: Robert Rodríguez

“Letras, identidad y corazón” es el espacio organizado por la escritora Miriam Peña, en la Carpa de la décima, ubicada por estos días frente al Club Siboney. Diversas manifestaciones artísticas se suman para festejar lo más autóctono de nuestra cubanía, el punto cubano. Alegría y gozo desde el céntrico Parque Calixto García durante la Edición 31 de la Feria Internacional del Libro, a través de remembranzas al guajiro natural, Polo Montañez, alusión a escenas costumbristas y estampas de la campiña, así como el empleo de la improvisación y las controversias entre poetas con el empleo de la picardía que les caracteriza, el fino humor criollo. Espacio donde la continuidad de una tradición oral y escritade nuestro patrimonio inmaterial está garantizada a través de la influencia en los más pequeños, quienes desbordan amor por el trabajo con el punto cubano. El poeta Agustín Serrano, Premio Cucalambé, y el Cuarteto Cubamar, son algunos de los invitados que por estos días amenizan las mañanas de la céntrica plaza holguinera.

Entregan en Holguín Suceso Cultural 2022

La entrega del Premio Nacional de Literatura al poeta Delfín Prats, mereció este sábado el Gran Premio al Suceso Cultural del año 2022 en Holguín, prestigioso galardón que otorga el Círculo de Periodistas de la Cultura en esta nororiental provincia.
Con el 72 por ciento de los votos emitidos, el Premio Nacional superó a la jornada de conciertos de la Orquesta Sinfónica de Holguín (14%), al estreno del documental «Cosme, un enorme juego con el tiempo», de la realizadora Alejandra Rodríguez Segura (9,5%); y al impacto de las jornadas de celebraciones por el centenario de la Banda Provincial de Conciertos, el aniversario 60 del Teatro Lírico Rodrigo Prats, el 30 de la compañía de danza contemporánea Codanza y los 25 años de Ediciones La Luz (4,5%).
En tanto, el Premio de la Popularidad, otorgado por votación a través de boletas electrónicas, lo obtuvo con una mayoría significativa la compañía de narración oral Palabras al Viento, por la integralidad y relevancia de las propuestas artísticas.
El galardón, que regresa luego de 3 años sin entregarse debido a la pandemia de la Covid-19, es convocado por la Dirección Provincial de Cultura a través del Centro de Comunicación Cultural La Luz y el Círculo de la prensa cultural, representado por periodistas de las emisoras Radio Holguín y Radio Angulo, el semanario ¡ahora!, el telecentro Tele Cristal, la Agencia Cubana de Noticias y los corresponsales de medios nacionales, como Radio Progreso, Radio Reloj, y los periódicos Granma, Juventud Rebelde y Trabajadores, además de los periodistas de La Luz.
En la gala, dirigida por Víctor Osorio Zaldívar, fueron entregados los diplomas acreditativos a los diez nominados al Suceso Cultural del 2022, entre los que destacan además de los ya mencionados: el proyecto colaborativo Configurando catacumbas (mundos soñados), realizado como parte de la XIV Bienal de La Habana; el diseño integral, alcance y repercusión de la XXX Feria Internacional del Libro de Holguín; el Primer Encuentro Provincial de Bailes Urbanos; la repercusión sociocultural en la comunidad El Paraíso, con la presencia de instituciones, artistas e intelectuales localea y nacionales; y el lanzamiento de «Cuando todo coincida», primer álbum del trovador Fernando Cabreja, bajo el sello discográfico Egrem.
La velada artística contó con presentaciones de varios de los nominados, además del grupo de teatro Mestizaje y el humorista William Delgado, quien celebra 60 años de vida artística en este 2023.
El Premio Suceso Cultural del Año se otorga en la provincia de Holguín desde el 2012 y coconstituye un importante estímulo a la creación artística de la provincia, reconocida como una de las plazas culturales más importantes del país.

La casa de todos

Por Abel Castro Sablón

Han transcurrido 40 años desde que un grupo de soñadores comenzaron a tejer ideas y sueños en pos de la cultura holguinera. Cuatro décadas en las que un edificio ha visto ensanchar sus paredes y alzar su techo para dar cabida a todo aquel que tuviese una inquietud por aprender a cosechar arte con sus propias manos.

La Casa Municipal de Cultura de Holguín, Manuel Dositeo Aguilera, se ha establecido desde hace 40 años como el hogar de instructores de arte, promotores culturales, artistas aficionados y profesionales, quienes han prestigiado y mantienen a Holguín como una de las urbes culturalmente más ricas de Cuba.

Por ello, como parte de la XL edición de la Semana de la Cultura Holguinera, no podía pasar por alto este suceso. En una colorida y variada gala, la Casa de Cultura celebró sus cuatro décadas de vida y reconoció a varios de sus fundadores, que se mantienen activos en el noble esfuerzo de cultivar artistas.

El evento sirvió como un muestrario de los talleres de creación de diferentes especialidades que se realizan en el centro, de donde han surgido importantes personalidades de la cultura en la Ciudad Cubana de los Parques, de la talla de la solista Delvis Lozano y el barítono Alfredo Más, entre otros.

No faltó la oportunidad para homenajear al poeta Delfín Prats, recientemente galardonado con el Premio Nacional de Literatura y a quien está dedicada la Semana de la Cultura, cuando la actriz e instructora de teatro Milvia García declamó para todos los presentes, el conocido poema Humanidad.

De igual manera, se sucedieron las presentaciones de niños artistas aficionados formados por la instructora Grisel Medina, quienes bailaron al compás de la famosa canción de Ernesto Lecuona, Damisela encantadora.

Asimismo, se presentaron otros proyectos como Ronda de los Sueños, Vidanz, el grupo Pequeños Artistas, los solistas Irma de la Caridad y Raysander, el septeto Sabor Cubano y la narradora oral Yulepsi Zamora, quienes arrancaron aplausos y hasta lágrimas de familiares y amigos emocionados y orgullosos.

La velada contó, además, con las presentaciones de artistas profesionales del calibre del grupo de teatro Mestizaje, con la obra Rumba; Vocal En Serio, quienes cantaron su tema Holguín; la solista Delvis Lozano, que deleitó con la canción Como arruyo de palma y el barítono del Teatro Lírico Rodrigo Prats, Alfredito Más, quien realizó una magistral interpretación de A mi manera.

En la gala, resultaron reconocidos destacados trabajadores de la Casa de Cultura Manuel Dositeo Aguilera, quienes desde hace 40 años se mantienen vinculados a este centro. Son los casos de Grisel Medina, Noel Zayas Álvarez, Miguel Mayán, Aracelis García Pupo, Hilda López Franco y Hermes González Fajardo.

Asimismo, la empresa Havana Club, quiso reconocer a otros fundadores, trabajadores y personalidades de la Casa Municipal de Cultura, como son los casos de Ricardo Ronda Chacón, el técnico de sonido Julio Falcón Camejo, el investigador Moisés Álvarez González y la directora del centro, Maritza Rodríguez Navarro, además del grupo Vocal En Serio.

Durante estas cuatro décadas transcurridas, la Casa Municipal de Cultura Manuel Dositeo Aguilera y sus trabajadores han dado cobijo a millares de niños, jóvenes y adultos holguineros con inclinaciones por el arte y han transformado esas inquietudes en realidades palpables, a través del amor y la dedicación a una de las profesiones más nobles. Esta es una casa que nunca cierra sus puertas, porque es la casa de todos.

Ver en compañía de adultos

Por Abel Castro Sablón

Te enteras de que la compañía Teatro Tuyo, de Las Tunas, está en la ciudad y se presentará con dos espectáculos titulados Charivari y Parque de sueños; decides asistir, porque nunca has podido ver su trabajo, aunque tienes tu escepticismo con el teatro clown. Piensas que tal vez sea algo infantil, aunque en las promociones diga “apto para todas las edades”. Par ti, apto para todas las edades significa “infantil”.

En la ciudad hace frío; una ventisca invernal recorre sus calles y parques, helando manos, narices, orejas de los transeúntes, ralentizando el ritmo de vida de esta urbe con ínfulas cosmopolitas de capital cultural. Pero en el interior del teatro el invierno parece magnificarse a la sazón del aire acondicionado.

Ocupas tu butaca, oteas en derredor y te parece que el teatro es majestuoso, más que de costumbre. Entonces te percatas de que, en efecto, el teatro se ha vuelto más grande, de hecho, ha duplicado su tamaño y el número de butacones; a tu lado, como al de todos los presentes, aparece un asiento vacío…

Te intriga el asunto, mientras, en el escenario, el director de Teatro Tuyo se disculpa porque la obra comenzará con un ligero retraso, debido a dificultades ajenas a su voluntad. En realidad no lo escuchas, sigues embelesado con la majestuosidad del teatro. Entonces te percatas de que estás a tu lado, sentado en la butaca que antes estaba vacía, mirando fijamente hacia el escenario.

En persona luces mucho más alto que en el espejo; estiras tu mano para tocarte, la duda te carcome. Dudas de si esto es una alucinación. Debe de serlo, piensas. Tal vez te estés volviendo loco; no has logrado dormir bien en varios días, tal vez semanas. Estirasla mano para tocar a tu alter ego y la percibes mucho más pequeña y delicada, como de niño. Devuelves la mirada a tu silla y te percatas de que tus pies no alcanzan el suelo y traes los mismos zapaticos que tu madre compró para tu quinto cumpleaños.

Esta vez regresas la mirada asustado hacia el tú del asiento contiguo, quien permanece con la mirada clavada en el tabloncillo donde grandes artistas se han parado a lo largo de más de ocho décadas. Tragas en seco, las manos te tiemblan y sabes que no es por el frío; esta vez eres un niño temeroso. En ese instante, suena una campana tres veces y las luces se apagan. Mueres de miedo.

La iluminación comienza a ir in crescendo y a su paso tu corazón se desboca, pero una mano enorme toma tu manita. Recorres con la vista toda la longitud del brazo ajeno que te sostiene; del otro lado, tu otro yo te mira inexpresivo, tal vez con la intención de transmitirte serenidad. En verdad la necesitas. En ese momento el yo le sonríe al tú y comienza a invadirte una extraña sensación de seguridad.

Las luces casi han terminado de encenderse y sobre el entablado empiezan a distinguirse cuatro siluetas, mientras una música un tanto triste acompaña todo el proceso. Paulatinamente, van apareciendo un farol, un banco, un recogedor y un latón de basura. También cuatro figuras humanas. Van vestidas con overoles grises, gorras protuberantes, zapatos enormes y una bola roja les cubre las narices. Esta vez, es yo quien mira y siente la mano del pequeño relajarse dentro de la tuya.

Las figuras en escena no tardan en sacar sus credenciales de payasos, haciendo piruetas, gesticulando exageradamente y realizando una escena que parece casi absurda, en la que todos luchan por abrir un paquete misterioso. Yo piensa que es un tanto ridícula la escena, pero tú comienza estallar en carcajadas con cada nueva acción. Las risas se van multiplicando por todo el teatro, cual enfermedad contagiosa. La tensión antes existente va desapareciendo poco a poco.

Finalmente, después de rodar de un lado al otro, el paquete en escena logra ser abierto y en su interior se descubre un pendón que reza: GRAN CIRCO DE LOS PAYASOS. Los cuatro personajes lo sostienen con cierto orgullo, henchidos y sonrientes. Yo no sabe si sonríen para el público o para sí mismos. Tú suelta la mano de yo y comienza a aplaudir, al compás de otros muchos centenares de manos. La luz se desvanece poco a poco…

Esta vez es yo quien no se siente cómodo, más bien se siente un tanto raro. Al hacerse la luz, yo percibe la escenografía de una carpa de circo; esta última palabra la adorna en todo lo alto y en mayúsculas: CIRCO. Una música animada e intensa se expande por cada rincón y, detrás de la supuesta carpa, empiezan a salir los payasos, cada uno con su pirueta personalizada, a manera de carta de presentación.

Ahora es tú quien mira sonriente las coloridas indumentarias, las contorsiones, saltos y vueltas de carnero; los gritos e interjecciones, porque los payasos no hablan, o casi no hablan, pero tú ríe a más no poder; el arte del clown radica en eso, provocar risa sin la necesidad de hablar. Ahí tenemos los grandes ejemplos de Marcel Marceau, Charles Chaplin, Buster Keaton, Stan Laurel y Oliver Hardy, por citar algunos.

En la obra, como se desarrolla en una carpa, obviamente se van sucediendo los números circenses y, tanto yo como tú, han ido descubriendo que el clown va más allá de vestirse como esperpentos y hacer cosas exageradas. En el número de magia, una de las payasas—porque yo se ha percatado de que todas son mujeres, aunque en ocasiones encarnen papeles masculinos—, intenta pasar un dado de un extremo al otro dentro de una caja con dos secciones.

Saca su varita “mágica” y con un toquecito “transporta” el dado de un extremo al otro. Tú ríe y aplaude maravillado. Yo lo mira, condescendiente con su inocencia; sabe que es un truco, que en algún momento de aquel tropezón o aquel estornudo, al agitar la caja, se abrió alguna compuerta y permitió el paso del dado “mágico”, o algo así. En algún lugar de sus amplias mangas, la payasita maga escondió el objeto, para hacerlo “desaparecer”, probablemente. En algunos casos, yo encuentra el acto previsible, pero luego mira a su lado y ve a tú con una risa de costa a costa y los ojos brillantes. No quiere romperle la ilusión, así que permanece en silencio.

En algún momento yo piensa: “pobrecito”. Luego sale a escena la equilibrista, quien sobre una mesa a un metro de altura coloca un rodillo y encima de este un tablón sobre el que se para y rueda de un lado al otro para mantener el balance. “No parece tan difícil”, piensa yo, un poco escéptico; “con un poco de entrenamiento se puede lograr”. Tú no para de sonreír, con los ojos cada vez más grandes y más brillantes.

Dos payasitas van retando a la equilibrista a realizar actos cada vez más arriesgados, en algunos casos da la impresión de cierto peligro o margen al error; en cierto momento, la equilibrista parece poder caer, el tablón se desliza de forma violenta sobre el rodillo y agita fuertemente todo su cuerpo, que se tambalea peligrosamente. Yo empuña todo su escepticismo y de manera un tanto pedante se dice en silencio “son profesionales, todo es parte del acto. Solo es un poco de drama, nada más”. Quisiera decírselo a tú, quien mira fijamente con mucha preocupación y temor. Tú piensa: “¿Y si cae?”.

Lo cierto es que la payasita equilibrista salta, se contorsiona y atraviesa por su cuerpo un aro, luego dos, con tres de estos hace malabares y, para cerrar, coloca tres banquillos sobre el tablón encima del rodillo; una caída desde allí se ve bastante perjudicial. Hasta yo se inquieta un poco, ya la acrobacia está pasando a otro nivel; el circo se está poniendo serio. Pero la artista se posa en todo ese andamiaje sin perder el balance y, al concluir, sus manos en el aire y una media reverencia indican un punto de partida para el estallido de aplausos y vítores. Tú es el que más aplaude y quien más fuerte lo hace.

El acto que le sigue es el domador de leones. Una payasita de baja estatura sostiene un látigo de juguete; en medio del escenario, hay una jaula vacía. Por uno de los extremos aparecen dos leones (de ambos sexos) con exageradas cabezotas de papier mâché que, ipso facto, arrancan carcajadas de la multitud. La domadora intenta que el león pase por un aro, pero se pega con el látigo en un pie y con hilarantes brincos sale de escena. Entonces es el propio león quien toma el látigo mientras la leona, que está embarazada, se sienta a tejer.

Con par de latigazos, la leona teje a ritmo vertiginoso y en par de segundos muestra un gorro y un abrigo que cuelga frente a sí. Lo absurdo de la escena provoca una risotada general, hasta yo cede ante tal imposible. El león sale y vuelve a entrar a escena con una pizarra donde está escrito con tiza: VENTA DE GARAJE. La carcajada se duplica y tú observa esta vez como yo se permite reír a mandíbula batiente. Tal vez esto sea el significado de “apto para todas las edades”.

Las actuaciones se van sucediendo a un ritmo muy dinámico, como en el circo. Salto sobre la cuerda, malabares con pelotas, bailes, acrobacias y contorsiones…payasadas. Los artistas ponen una gran parte y la imaginación el resto. El público está feliz, hasta el más escéptico. Casi por última vez, la luz comienza in decrescendo hasta que todo es penumbra.

Cuando retorna el brillo de las luminarias, despiertan las cuatro payasitas del inicio, con sus overoles grises, sus gorras protuberantes, zapatos enormes y una bola roja sobre sus narices. Lentamente, van desapareciendo del escenario, de una en una, llevándose consigo el banco, el recogedor y el latón de basura. La misma música triste acompaña la escena, hasta que la última payasita sopla el farol y cae el telón. Una extraña atmósfera se respira en la sala; un placer angustioso.

Yo y tú se miran fijamente. En el rostro de yo permanece una sonrisa indeleble, mientras que tú ha convertido el suyo en una cascada. Se abre el telón, las cuatro ARTISTAS caminan hacia el frente. El teatro comienza a hacerse más pequeño, los sillones ahora solo son la mitad; la gente también. Sin embargo, los aplausos se escuchan el doble en esta ocasión. Una multitud que permanece de pie exclama “¡Bravo!”, sin dejar de hacer un estallido sonoro con sus manos. Las ARTISTAS retiran sus narices falsas y sus gorras protuberantes. En sus caras se adivinan lágrimas contenidas por la emoción, la misma sensación de cuando un amigo muy querido tiene que partir.

En esta escena final yo y tú son el mismo, fundidos en un solo cuerpo; la sonrisa del hombre y el llanto del niño. Ambos aplauden al unísono en una sola forma física, con la felicidad en los labios y los ojos aguados, como diciendo “hasta pronto”.  Esta noche, yo logra dormir plácidamente; tú le acompaña con dulces sueños.

Holguín celebró el 64 aniversario del triunfo de la Revolución

Por Vanessa Pernía Arias

Con la gala artística “Revolución, con ella yo me quedo” celebró Holguín, en la noche de este jueves, frente al Museo Provincial de Historia La Periquera, el aniversario 64 del triunfo de la Revolución cubana.

El espectáculo, dirigido por el maestro Oreste Saavedra, realizó un recorrido por las gestas libertadoras hasta el triunfo definitivo del Primero de Enero de 1959, a partir de temas musicales y textos poéticos que han marcado un espacio imprescindible en la conformación de la nacionalidad cubana.

La Orquesta Sinfónica de Holguín, dirigida por el propio Saavedra, acompañó a lo largo de la velada, a los solistas y intérpretes Yhamila Rodríguez, Gladys María, Marien Fernández, Nadiel Mejías y Norberto Leyva, quienes interpretaron temas antológicos de Silvio Rodríguez, Pablo Milanés y Sara González, figuras fundamentales del Movimiento de la Nueva Trova.

Además, el septeto Zenda propuso otras sonoridades con canciones populares que han quedado prendadas en el imaginario de la isla como “Y en eso llegó Fidel”, del trovador manzanillero Carlos Puebla.

Mientras que integrantes de la Compañía de Narración Oral Palabras al Viento tejieron en sus voces los versos de Jesús Orta Ruiz (El Indio Naborí), José Martí, Carilda Oliver, Nicolás Guillén y Raúl Gómez García.

También participaron en la gala la bailarina y coreógrafa Vianky González, el Orfeón Holguín, la compañía folklórica D’Okokan y el coro infantil de la Escuela Elemental de Arte Raúl Gómez García de Holguín.

El sentimiento patrio, de lucha en aras de la libertad, abarcó el tema central de la velada, que finalizó con una felicitación por el advenimiento del año nuevo y el aniversario de la Revolución, a partir del verso “Son muchas las razones a defender, difícil es el camino, pero seguimos en él”.

Acompañaron al pueblo holguinero en la celebración Ernesto Santiesteban Velázquez, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y primer secretario en la provincia; Julio César Estupiñán, Gobernador de Holguín, entre otros dirigentes políticos y gubernamentales.

 





Medalla Raúl Gómez García para artistas holguineros

Por Vanessa Pernía Arias

Fotos Heidi Calderón (¡ahora!)

La Medalla Raúl Gómez García, la más alta distinción que otorga el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura (SNTC), fue entregada en Holguín a reconocidos creadores como parte de la jornada provincial por Día del Trabajador de la Cultura, fecha que recuerda cada año el natalicio del poeta de la Generación del Centenario, Raúl Gómez García.

La recibieron Liudmila Pérez, soprano y directora del Teatro Lírico Rodrigo Prats; el barítono Alfredo Más y el coreógrafo Alejandro Millán, ambos miembros de este prestigioso colectivo escénico que celebra este año su aniversario 60; Grisel Velázquez, al frente de la Compañía Infantil Ronda de los Sueños, y el director artístico Alberto Fernández.

En el encuentro –realizado en el Centro Cultural Bariay y que recordó los 50 años de fundado el Movimiento de la Nueva Trova, con dirección artística de Grisel Velázquez– se entregó la condición Centro Martiano, otorgada cada año por la Sociedad Cultural José Martí y la Central de Trabajadores de Cuba, a la emisora provincial CMKO Radio Angulo y la filial holguinera de la UNEAC, que reúne la vanguardia artística en la provincia.

Se reconoció, además, por el trabajo realizado durante este año, a la Unidad Provincial de Apoyo a la Actividad Cultural (Upacc) y al Fondo Cubano de Bienes Culturales; mientras que de manera individual se destacó, entre otros, el quehacer de Rachel García Heredia, directora del Sectorial Provincial de Cultura, y Ricardo Ronda, director de la Upacc.

Los solistas Liudmila Pérez, Alfredo Más, Ernesto Infante, Lucrecia Marín y Mariem Rodríguez; la bailarina y coreógrafa Vianky González;y los colectivos Vocal en serio, Ronda de los Sueños y la centenaria Orquesta Hermanos Avilésofrecieron su arte al público.

 

 





Premia Holguín a exponentes de la cultura comunitaria

Por Vanessa Pernía Arias

Fotos ¡ahora!

Auspiciado por el Consejo Nacional de Casas de Cultura y la Dirección Provincial de Cultura en Holguín, fue entregado el Premio Provincial de Cultura Comunitaria 2022, como parte de la jornada de actividades por el aniversario 64 del triunfo de la Revolución Cubana.

Este año el Premio fue entregado en el municipio Frank País, a propósito de realizar su Semana de la Cultura, y reconoció a personas, proyectos e instituciones que se destacaron en el mejoramiento sociocultural comunitario y el nivel de vida de sus habitantes.

El jurado de esta edición 23 –integrado por Isabel García Granados, directora de la filial del Instituto Superior de Arte; Eliel Gómez, presidente de la Sociedad Cultural José Martí en Holguín; y el actor y narrador oral Yordanis Sera– evaluó unas 10 propuestas, y en la categoría Personalidad otorgó el Premio a Héctor Luis Laurencio Perdomo, promotor cultural de Mayarí, y el profesor y promotor de Báguanos, Manuel Fernando Martínez Bruzón.

El proyecto sociocultural comunitario Mambisol, de Frank País, fue reconocido por sus aportes al desarrollo artístico local y su trabajo con los más pequeños; y como institución, fue galardonada la Banda Municipal de Conciertos del municipio Sagua de Tánamo.

Se entregó también un reconocimiento especial a la Federación Estudiantil Universitaria en su centenario, por el apoyo brindado a potenciar el movimiento de artistas aficionados.

El Premio reconoce la contribución del arte en la transformación de estilos de vida, conductas y formas de pensamiento en el barrio; y estimula la creación artística y literaria, el enriquecimiento del patrimonio, la defensa de nuestras raíces y la identidad cultural, para, a su vez, elevar la calidad de vida en las comunidades en la oriental provincia.





Celebra el Teatro Lírico Rodrigo Prats de Holguín su 60 aniversario

Por Vanessa Pernía Arias

Fotos CPAE Holguín

Con el ejercicio académico Celebrando a Cecilia Valdés, realizado por alumnos de la carrera de Educación Artística de la Universidad de Holguín, inició en el Complejo Cultural Teatro Eddy Suñol una jornada de presentaciones, que se extenderá hasta el mes de diciembre, a propósito del aniversario 60 del Teatro Lírico Rodrigo Prats de Holguín.

Con el apoyo del Consejo Provincial de las Artes Escénicas, el Lírico y el Complejo Cultural, la puesta es una versión de la conocida zarzuela cubana Cecilia Valdés de Gonzalo Roig, basada, asimismo, de la novela Cecilia Valdés o la loma del ángel, de Cirilo Villaverde, clásico de la narrativa cubana del siglo XIX. La puesta reconoció, además del Teatro Lírico, a la Compañía de Danza Contemporánea Codanza, dirigida por la maestra Maricel Godoy, en sus 30 años, y al centenario de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU).

Liudmila Pérez, directora del Lírico, comentó en conferencia de prensa que con la jornada pretenden homenajear a los grandes maestros que han pasado por la compañía desde su fundación y resaltar la obra que los ha acompañado durante estas seis décadas.

Para ello realizarán una peregrinación hasta la tumba del barítono Raúl Camayd, fundador de la que es considerada una de las mejores compañías de teatro musical cubano. Además se estrenará el espectáculo Tres lindas cubanas, con guion y dirección artística del barítono Alfredo Mas, basado en las reconocidas zarzuelas cubanas Cecilia Valdés, María La O y Amalia Batista, de Gonzalo Roig, Ernesto Lecuona y Rodrigo Prats, respectivamente.

El programa incluye la interpretación de selecciones de la ópera La flauta mágica, de W. A. Mozart, en colaboración con el director alemán Michael Elverman, así como una Gala lírico-sinfónica con varios éxitos operísticos, interpretados por la Orquesta Sinfónica de Holguín, dirigida por el maestro Oreste Saavedra. Se repondrá también el sainete cómico El alcalde honrado, un espectáculo protagonizado por estudiantes recién graduados de Nivel Medio de Canto Lírico, bajo la dirección artística de la actriz Mireya Abreu.

La puesta en escena de la zarzuela Los gavilanes, dirigida por Raúl Camayd, el 16 de noviembre de 1962, marca el punto de partida para la fundación del Teatro Lírico Rodrigo Prats de Holguín, una institución cultural que con el transcurrir del tiempo se ha convertido en una de las más prestigiosas de su tipo en el país, baluarte de la cultura cubana.





En un lugar de La Mancha…

…de cuyo nombre no puedo prescindir, cada octubre románticos empedernidos se empeñan en mantener viva una tradición que sobrepasa el medio milenio.

El tradicional colorido inundó las calles holguineras este 25 de octubre en ausencia de su homólogo aguacero que tipifica el décimo mes del año. La Edición 28 de la Fiesta de la Cultura Iberoamericana no podía prescindir del
Pasacalle por donde desfilan las delegaciones extranjeras, invitados nacionales, así como el talento artístico, personalidades e instituciones a las que se le dedica la presente cita.

El Quijote y su leal Sancho emprendieron la fiel travesía desde el emblemático parque que lleva su nombre hacia otra simbólica plaza de la Ciudad de los parques, el “Carlos Manuel de Céspedes” o San José, como popularmente se
le conoce, tras ellos, y por una de las principales arterias holguineras, estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas, de Holguín, así como de la enseñanza artística, las compañías de Danza Encuentro, Renacer Flamenco,
Mónica Dance, y Folclórica La Campana, así como de Modas Fantasía, el Grupo Neón Teatro y nuestro Guiñol, unidos a la delegación de México y el jazzista Quincy Jones, estos dos últimos en calidad de invitados especiales.

A 530 años del Encuentro entre dos culturas, el Centenario de Antonio Núñez Jiménez y la Banda Provincial de Conciertos, el 60 del Lírico y del periódico ¡ahora!, a 30 años de un debate cultural e igual aniversario de la Compañía de Danza Contemporánea Codanza, constan como las principales dedicatorias del presente encuentro multicultural donde no podía faltar el homenaje al Maestro Cosme Proenza, uno de los más grandes holguineros, representados desde diferentes perspectivas de su obra, entre ellas la Virgen de la Caridad.

Como colofón de la jornada vespertina se presentó además el jazzista estadounidense Quincy Jones, acompañado de los jóvenes talentos de la música holguinera para concebir interpretaciones de lujo, equiparadas en destreza y maestría con sus sucesores-aunque no aún con su experiencia-, la centenaria Banda Provincial de Conciertos. No es de extrañar que durante tal celebración, la Casa de Iberoamérica aprovechara para reconocer con la distinción que lleva su nombre a la Banda y a Codanza, sin lugar a dudas instituciones muy ligadas al trabajo de la Fiesta Ibero, así como símbolos de la cultura holguinera en la manifestación que se desempeñan.

Los textos de nuestro poeta nacional Nicolás Guillén así como el regalo musical de la Rondalla Quinteto Magisterial México, quien hizo gala de temas típicos de la hermana región norteña, matizaron el encuentro donde no podía faltar
nuestro folclore campesino, ese que también forma parte del legado ibérico que celebramos en Holguín por estos días.





Brindis por la península, por la madre patria

En esa oda imprescindible a las raíces que nos legó la Península Ibérica se empeña la Ciudad de los parques cada octubre. No es casualidad que en fecha consonante al encuentro entre dos culturas, la tierra más hermosa acoja esta serie de festejos devenidos en la Fiesta de la Cultura Iberoamericana.

Un emblemático edificio del nororiente cubano habitualmente deviene por estos días en epicentro de las actividades artísticas, el Museo Provincial La Periquera, devenido para la ocasión en Centro Cultural Ibérico.

La inauguración del prominente espacio ocupó la tarde de este lunes 24 de octubre donde los presentes brindaron por nuestros nexos tradicionales, así como por la salud y buenas vibras para esta suerte de plataforma de socialización que es la Fiesta Ibero.

El talento local protagonizó el canto y la danza en homenaje a la península a través de los solistas Luis Oramas Pérez, integrante del catálogo de la Empresa Provincial de la Música y los Espectáculos “Faustino Oramas Osorio”, y José Gabriel Reyes, reciente adquisición del Teatro Lírico “Rodrigo Prats”, a quienes se sumó para engalanar el encuentro vespertino las interpretaciones de las muchachas de la Academia Encuentro.

El tradicional brindis a cargo del Club de Vinicultores Bayado, representado por su presidente, Rosell Martínez,-quien organiza además alcanza la décima  edición del Festival de vinos artesanales-, marcó la pauta para arrancar con las celebraciones que ocuparán por estos días a la insigne edificación holguinera, el Museo Provincial.

El Conversatorio sobre la “Vida artística del poeta andaluz Federico García Lorca”, acompañado de nueve poemas musicalizados, presentado por el Dr. C José Rojas Bez y el homenaje al 120 Aniversario del Natalicio de José Agustín García Castañeda, a través de la presentación del texto José Agustín García Castañeda. Un científico holguinero del siglo XX, de las autoras Isairis Rojas Paris y Margarita Paris Johnson, sobresalen en el apartado científico y académico de las propuestas del Centro Ibérico; a lo que se suman los conciertos de “Rondalia Quinteto Magisterial”, agrupación invitada desde México, y otro de la solista Gladys María Moreno Bonet. Por su parte, la danza ocupará igual relevancia en el céntrico espacio del nororiente cubano, a través de las actuaciones de la Academia Renacer y el Ballet Mónica Dance, a lo que se suma un encuentro de Academias de baile flamenco, pactado para el próximo miércoles 26 de octubre.