
Por Juan Pablo Aguilera Torralbas
Preservar las historia de la localidad, mirando al futuro, fue el objetivo de la XVII edición del Taller La ciudad que queremos, que se celebró en la Ciudad de los Parques, a propósito del aniversario 473 de la fundación del Hato de Holguín.
Organizado por la Unión de Historiadores de Cuba en el territorio y la Oficina de Monumentos y Sitios Históricos, este espacio reunió a historiadores, urbanistas, investigadores y arquitectos de esta ciudad, para intercambiar y reflexionar sobre cómo mejorar nuestra ciudad.
El evento que se realizó del 3 al 4 de abril, tuvo como escenario la Sala 3D, y se desarrollaron paneles con diferentes temáticas como: Los orígenes de la ciudad, su desarrollo histórico, las acciones que se deben realizar para mejorar su arquitectura, así como el debate sobre las proyecciones de la ciudad para el futuro.

Interesantes debates abordaron temas sobre las acciones para mejorar el urbanismo, evidencias arqueológicas, versiones sobre la fundación de la ciudad; así como proyectos comunitarios, entre ellos las Verbenas de Güirabito que rescatan las tradiciones de esta localidad holguinera.
“Me parece que tiene que haber un espacio para la reflexión y el intercambio, aunque no quiere decir que todos estemos de acuerdo con todo lo que se dice. Un evento como este resulta necesario para la ciudad y para la provincia”.
El historiador holguinero expuso además que se debe “conservar nuestro patrimonio y cuidar lo que se está haciendo a partir de los esfuerzos convocados”. Tambien insistió en la educación patrimonial tanto desde las escuelas, el hogar, las instituciones, como desde los medios de comunicación.
El evento cerró sus puertas en la Casa del Teniente Gobernador, edificación del siglo XVIII y más antigua de Holguín. Lugar que recuerda el origen de la ciudad. Allí tuvo lugar el tradicional brindis de vino y casabe, símbolo del encuentro entre las culturas aborígenes y españolas; y se lanzó la convocatoria a la décimoctava edición del taller.
La realización de este espacio anualmente permite la reflexión, el intercambio y el aprendizaje, por eso permanece abierto para todo tipo de público.